Narra Harry.
Estaba a punto de quedarme dormido
cuando escuché que llamaban a la puerta de la habitación. Gia se removió entre
las sábanas.
-¿Qué pesado será? –preguntó ella
y solté una risita. Me levanté y fui hasta la puerta. Cuando la abrí, me
encontré con Jess.
-¿Qué pasa? –pregunté.
-Zayn me ha dicho que te
avisara.-respondió.- Al parecer ya tenemos lo que buscábamos.-Eso solo
significaba una cosa: tenía que interrumpir a la pareja.
-Perfecto.-dije.
-¿Dónde vas?
-A echar un último cable al
Tommo.-Jess me siguió hasta la habitación de Louis. Me aclaré la garganta e
hice unos gestos como si estuviera preparándome para salir a actuar a una obra
de teatro que hicieron que mi acompañante riera.- Calla mujer, que nos van a
pillar.
-Te dejo solo entonces.-dijo.-
Hasta mañana y suerte, que no sea muy desagradable la escena.
Una vez desapareció tras la
puerta de su habitación, me dispuse a dar un par de toques en la madera pero
nadie respondió. Claro, estarían ocupados. Así que, ni corto ni perezoso, abrí
la puerta con sigilo.
-Louis.-lo llamé y rápidamente,
cuatro ojos se posaron en mi figura.-Siento molestar.-me disculpé intentando no
reír. La cara de Vanessa era un poema.-Es que Gia se encuentra fatal y quería
saber si te has traído esas pastillas que tiene tu madre que lo curan todo.
Narra Jessica.
-¿Lo hueles? –dijo Zayn a mi
lado. Le miré extraña. ¿Qué le había dado a este ahora? –Es el olor a la
victoria, al triunfo de mi maravilloso plan.-no pude evitar reírme.
-Eso no es lo que decías hace
unos días.-dije levantándome de la cama, tras besar levemente sus labios.-
Y.-enfaticé.- Aún no has triunfado, ella habrá confesado pero no sabemos cómo
se lo va a tomar Des.
-Gracias por amargarme la mañana,
cariño.-volví a besarle y ambos bajamos a desayunar.
En la cocina estaba el resto del
grupo, éramos los últimos en llegar. Dimos los buenos días a todos y nos
sentamos alrededor de la barra americana que había.
-¿Te encuentras ya mejor, Gia?
–preguntó Vanessa con cara de pocos amigos.
-¿Por qué lo? –un codazo
disimulado de su novio no la dejó acabar aquella pregunta.- Ah, sí, sí, mucho
mejor, gracias por preguntar. Algo de la cena de ayer debió sentarme mal.-Ella
los miró con el ceño fruncido, como si supiera que le estábamos escondiendo
algo, así que lo mejor fue cambiar de tema.
-Bueno.-hablé.- ¿Qué planes
tenemos para hoy?
-Pues no sé.-dijo Bec
encogiéndose de hombros.
-Yo no tengo ganas de moverme de
casa.-admitió mi novio.
-Podemos quedarnos y jugar a algo
en plan por equipos.-sugirió Tay.
-Me parece perfecto.-le apoyó
Nialler.- ¿Chicos contra chicas?
Narra Zayn.
La noche pasada nos dejó a todos
algo cansados así que, decidimos pasar el día completo en casa. Taylor había
sugerido jugar a algunos juegos de mesa y eso fue lo que hicimos, divididos en
dos equipos: chicos contra chicas. Afortunadamente, el tío de Rebecca tenía
guardado en el salón un gran repertorio de juegos entre los que se encontraban
los típicos: Trivial, Scattergories, Pictionary.
-¿Por cuál empezamos? –preguntó
Des.
-Elegid vosotras.-respondió
Harry. Hicieron un pequeño consenso entre todas y, al final, se decidieron por
el Scattergories.
El juego era bastante sencillo:
había un dado con todas las letras del abecedario y tarjetas con distintas
categorías. Una vez lanzado el dado, se trataba de buscar una palabra para cada
categoría que empezara con la letra elegida al azar dentro de un tiempo
establecido.
-Zayn, te toca.-habló Gia.-
¿Animales que se encuentren en el zoo con la ‘h’? –miré mi tarjeta para leer lo
que había escrito.
-Hormiga.-dije y todos
rieron.-¿Qué?
-¿Cuándo has visto una hormiga
enjaulada en el zoo? –preguntó divertida Tay. No contesté. Mierda. Tenían
razón.
-Pero las hay.-salió en mi
defensa el rubio.- Están por el suelo.-las chicas volvieron a reír negando con
la cabeza.
-No vale.-dijo Des.
-¡Claro que vale!-dijo Harry.-
Aquí pone “que se encuentren” no especifica que estén en exposición o no así
que…es totalmente válido.
-Sois unos tramposos.-dijo Jess
cruzándose de brazos.
Narra Taylor.
El Scattergories trajo más de una
discusión como la de la hormiga pero al final, terminábamos siempre riéndonos y
lo pasamos bastante bien. Los ganadores, por supuesto, de aquel juego fuimos
nosotras. El siguiente lo eligieron ellos y, a modo de venganza, escogieron el
Pictionary.
-A ver si ahora os reís tanto,
niñas.-dijo Louis colocando el tablero, una libreta para dibujar, un lapicero y
una goma de borrar más un reloj de arena que marcaría el tiempo sobre la mesa.
-Ejem, ejem.-carraspeó Gia.-
-¿Habéis olvidado que tenemos a
una “Picasso” entre nosotras? –dije con retintín.
-¡Y a una diseñadora! –exclamó Bec.
Reímos y chocamos nuestras manos
al ver la cara de los chicos, eso no lo habían pensado ellos. Zayn dibujaba de
maravilla pero los demás…digamos que el dibujo no se encontraba entre sus cualidades.
Empezamos a jugar y, tal y como
habíamos predicho, Zayn hacía grandes dibujos que los demás adivinaban con
facilidad pero cuando ocurría al contrario, la cosa cambiaba. Los garabatos
indescifrables de Louis terminaron por sacar de quicio al irlandés y, al final,
ganamos nosotras de nuevo.
Después de comer, seguimos
jugando, esta vez al Trivial, juego en el que de una vez por todas, ellos
consiguieron ganar. Nos llevó toda la tarde que alguno de los dos equipos
consiguiera todos los “quesitos” y después, hicimos la cena.
Narra Niall.
Louis y Vanessa se marcharon
después de cenar para ir a la estación donde ella cogería su tren de vuelta a
casa. ¡Al fin! Y todos nos habíamos desperdigado un poco por la casa.
-Psss, Nialler.-sentí que alguien
me llamaba. Me giré para encontrarme con Liam que me hizo una seña para que me
acercara.
-¿Qué pasa? –pregunté entrando en
el salón. Allí estaban Liam, Zayn y Harry toqueteando el ordenador.
-Tienes que buscar a Des y
traerla aquí.-explicó Harry.-
-Es la parte final del
plan.-anunció Zayn.
-¿Por qué yo?
-Porque eres su mejor amigo.
Venga.-me apresuró Liam.- Ve a por ella y no protestes más.
Resoplé y salí resignado de allí.
Subí al piso de arriba y fui a buscarla a su habitación.
-¿Puedes venir un momento, Des?
-Uy, me has llamado Des, es algo
gordo entonces, ¿qué pasa? –dijo levantándose de la cama y dejando el libro que
estaba leyendo en la mesilla.
-Solo ven, por favor.-pedí y
accedió. Bajamos las escaleras y cuando ya estábamos llegando al salón, pudimos
escuchar perfectamente el video que Zayn había grabado.
-¿De qué va todo esto, Nialler? –me
preguntó con el ceño fruncido, sin querer mirar cómo en el ordenador, Louis y
Vanessa se besaban apasionadamente.
-Hay algo que tienes que
escuchar.-murmuré. Odiaba tener que hacerle pasar por esto. Pero el momento
clave no tardó mucho en llegar.
Narra Destiny.
¿Me hacía entrar en el salón para
que viera el polvo que habían echado anoche? ¡Esto era el colmo de los colmos!
-Hay algo que tienes que
escuchar.-dijo mi amigo. ¿El qué tengo que oír? ¿Cómo grita su nombre o qué?
Pero entonces le comprendí, algo llamó mi atención cuando la capitana empezó a
hablar.
-Todo esto está siendo mucho más
fácil que la última vez.-habló mientras dejaba que Louis recorriera su cuello
con la boca.- No he necesitado echarte nada en la copa.-y entonces Niall cerró
el portátil.
-Ya está, no necesitas ver nada
más.-me dijo mirándome. Podía ver que se sentía culpable. Su mirada me lo
decía.
-En realidad, no necesitaba ver
nada de esto.-admití.- ¿Este era vuestro gran plan? –exclamé. Al oírme, los
demás acudieron a ver qué ocurría.
-Has comprobado que Louis no tuvo
la culpa de lo que pasó.-dijo Zayn. Negué con la cabeza.
-Me da igual quién tuviera la
culpa, Zayn. ¿No podéis entender que no quiero tener nada con él? Ya no.-y
dicho aquello, salí de allí, en dirección al jardín que la casa tenía.
Necesitaba tomar un poco de aire.
Todo esto me superaba cada día más. Y cada día intentaba convencerme a mí misma
de que lo mejor era pasar página, olvidar todo lo vivido con Louis y encontrar
a alguien que consiguiera hacerme feliz.
Narra Louis.
Llegué a casa tras deshacerme de
Vanessa y las caras de mis amigos eran un poema.
-¿Qué os pasa que tenéis esas
caras? –pregunté.
-El plan.-empezó a decir Harry.
-No ha funcionado.-terminó Zayn.-
Des ya lo ha visto todo.
-¡Contadme algo que no supiera
ya! –exclamé.- ¿Dónde está? –pregunté.- Quiero hablar con ella.
-No creo que quiera-no dejé que
Taylor acabara su frase.
-En el jardín.-me sorprendió
bastante que el que me dijera su paradero fuera Niall.
-Gracias.-respondí y fui hasta
allí. Abrí la puerta y me la encontré sentada en un escalón, mirando al
frente.- ¿Puedo? –pregunté una vez cerré la puerta, poniéndome a su lado. Se
encogió de hombros y me senté.- Ya me han contado lo que ha pasado.-empecé a
hablar.-Des…quería pedirte perdón, por todo lo que he hecho desde aquel día.
-Te dije que no quería ninguna
prueba.-
-Lo sé, pero ya sabes cómo son
estos, no pueden evitar idear planes absurdos.-sonrió levemente, algo que me
hizo sonreír a mí también y que, por un momento, me dio algo de esperanza.
-Sé que quieren lo mejor para
nosotros.-dijo.- Pero, dudo que volver a estar juntos sea lo mejor, para
ninguno de los dos.
-Des yo…-no me dejó continuar.
-Louis, no puedo, de verdad que
no.
-¿Es por ese amigo tuyo? Peter, ¿no?
¿Le quieres? –me atreví a preguntar temiendo la respuesta. Negó con la cabeza.
-Siempre voy a estar enamorada de
ti, Louis.-murmuró.- Pero ya no confío en ti.
Y se marchó de allí, dejando que
aquellas dos últimas frases se repitieran sin cesar en mi cabeza.
Narra Gianna.
Nos habíamos quedado un poco
chafados. A pesar de todo, creíamos que el plan funcionaría pero no. Des seguía
siendo la misma cabezota de siempre y no entraba en razón. Vamos,
probablemente, no hubiera perdonado a Louis ni aunque la propia Vanessa en
persona le hubiera dicho que ella misma había drogado a Louis para acostarse
con él.
-¿Y ahora qué? –pregunté dejándome
caer en el sofá.
-Ahora nada, hemos
fracasado.-dijo Liam.
-Yo no lo soporto más, voy a
subir a hablar con ella.-anunció Niall.
-Te acompaño.-dijo Taylor y ambos
salieron del salón. Se cruzaron con Louis.
-¿Y bien? –le preguntó mi chico,
con bastante curiosidad.
-Dice que siempre estará
enamorada de mí.-habló cabizbajo.
-¡Pero eso es genial! –exclamó Jess.
-Supongo.-volvió a hablar el
castaño.- Lo que no es tan genial es que ha perdido la confianza que tenía en
mí.-Jarro de agua fría. Ya decía yo que sonaba demasiado bonito como para ser
verdad.
-¿Y qué piensas hacer? –preguntó Liam.
-Quizás si.-empezó a decir Zayn y
todos le miramos. Alzó las manos.- Vale, vale, lo pillo. Nada de planes.
-Exacto.-dijo Louis.- Nada de
planes. Se acabó. No quiero hacer nada más.
-Pero no puedes darte por vencido
así, Louis. Después de todo.-dije yo.
-Sí que puedo, Gia. La conoces de
sobra, sabes que cuando alguien pierde su confianza, no la recupera así como así.
Narra Liam.
A partir del día que Vanessa dejó
la casa y todo quedó al descubierto, las cosas siguieron su curso. Bajábamos
casi todos los días a la playa, ya que estaba haciendo un verano extrañamente
caluroso en Inglaterra, y al menos, desde que Louis y Des mantuvieron aquella
conversación habían dado un paso adelante: ahora se hablaban. No es que se
tiraran las horas muertas charlando pero interactuaban.
Los días pasaban demasiado
deprisa y, cuando quisimos darnos cuenta, estábamos ya en la mitad de las
vacaciones. Por estas fechas se celebraba una feria en el pueblo así que, aquel
fin de semana lo teníamos bastante completo.
“Os espero a las nueve en la
plaza, no seáis los tardones de siempre” –me escribió Peter via Whatsapp.
Peter se había unido a nuestro
grupo y le veíamos diariamente aunque había cierta persona a la que no le caía
demasiado bien. Tenía miedo de que su chica intentara rehacer su vida teniendo
un agradable amor de verano con el rubio.
-Chicos, ¿os queda mucho? –grité desde
abajo. Llevaba ya como media hora listo y allí no aparecía nadie. Tampoco
contestaron así que decidí subir a ver qué ocurría.- Tay, ¿por qué demonios
tardáis tanto? –y ahí lo descubrí: estaban todas las chicas en mi habitación.
-Eh, Payne, sal de aquí.-me
chillaron las cinco.
-Ya me voy, pero bajad rápido.
Voy a ver cómo van los lentorros.
Narra Rebecca.
Íbamos a salir esa noche. Un
grupo de música tocaba en la plaza del pueblo y habíamos pensado que sería
divertido ir a verlo. Así podríamos bailar un rato además de disfrutar de las
atracciones que habían colocado en lo que se había convertido en el recinto
ferial durante ese fin de semana.
No sé cómo, pero habíamos acabado
las cinco en la habitación de Taylor, decidiendo qué ponernos para salir.
-Creo que te queda mejor con esa
blusa.-le indiqué a Gia que estaba indecisa entre ponerse una camisa de media
manga o una blusa de tirantes con la falda que llevaba.
-¿Por qué tengo que llevar
vestido? –refunfuñó Jess.
-Porque lo dice nuestra
estilista.-respondió Tay riendo.-
-Y porque a Malik le gustas más
así.-dijo Des.
-¡A Zayn le gusto en pantalones! –replicó.
-¿Le preguntamos? –dije divertida.
-¡No! ¡Ni se os ocurra!
-Venga, Jess, si estás muy mona.
¡Lo que nos faltaba! Éramos ya lo
suficientemente tardonas cuando nos vestíamos individualmente, imaginaos las
cinco juntas en la misma habitación. Seguimos un poco más de cachondeo hasta
que Liam irrumpió para meternos prisa. Terminamos de vestirnos, peinarnos y
maquillarnos un poco y cuando estuvimos listas, bajamos para encontrarnos con los
chicos y salir de casa. Aquella noche prometía ser bastante divertida.
¡Hola, hola! Aquí os dejo un nuevo capítulo por favor, ¡no me matéis! Era obvio que el plan no iba a funcionar... Pero ya os aviso de que algo ajhsfdbfhjsd pasará creo que en el siguiente ya. ¡Al fin se han librado de Vanessa! ¿Creéis que Des será capaz de confíar de nuevo en Louis? ¿O está todo perdido definitivamente? Ah, el gif de Liam no tiene mucho sentido, la verdad, pero me gustaba so... Nada más por hoy, ah sí, una ultima cosilla tanto aquí como en Our Little Secret he notado que han bajado muchísimo los comentarios... ¿por qué ya no comentáis? ¿qué os he hecho? Snif snif :'''( En fin...en cuanto tenga el siguiente, lo subo. Muchas gracias.
Love,
Sarai.